Investigan el papel de un…

El BRCA2 suprime los tumores de mama y ovario porque evita la formación de hí­bridos entre ADN y ARN, cuya acumulación provoca daño y estrés durante la replicación de la célula, según ha mostrado un estudio liderado por el Consejo Superior de Investigaciones Cientí­ficas (CSIC), y publicado en la revista ‘Nature’.

Y es que, aunque las mutaciones en los genes BRCA1 y BRCA2 aumentan el riesgo de padecer cánceres de mama y ovario, cuando se encuentran en su forma original, sin sufrir mutaciones, se encargan de suprimir los procesos tumorales relacionados con la aparición de esos dos tipos de cáncer. “La formación de hí­bridos de ADN y ARN hace que los cromosomas se compacten e impide que se repliquen correctamente, lo que provoca mutaciones. Se sabe que la inestabilidad de los cromosomas influye en origen del cáncer y en este estudio hemos descubierto que BRCA1 y, sobre todo, BRCA2 contribuyen a mantener dicha estabilidad”, ha explicado el experto del Centro Andaluz de Biologí­a Molecular y Medicina Regenerativa, centro mixto del CSIC, la Junta de Andalucí­a, la Fundación Progreso y Salud, la Universidad de Sevilla y la Universidad Pablo de Olavide, Andrés Aguilera.

Por último, según los autores del artí­culo, los resultados han mostrado funciones moleculares desconocidas hasta el momento para estos supresores de tumores y pueden ayudar a entender los mecanismos que dan lugar al origen de los tumores de ovario y de mama.