La Comunidad de Madrid facilitará espacios adecuados dentro de los centros hospitalarios para fomentar la actividad fí­sica y el autocuidado del paciente hemofí­lico, según un convenio firmado ayer por el Servicio Madrileño de Salud y la Asociación de Hemofilia de la Comunidad de Madrid. El acto fue presidido por el consejero de Sanidad, Javier Fernández-Lasquetty, quien manifestó que el convenio persigue mejorar la calidad de vida de los pacientes, no fomentar el ahorro sanitario.

Además, se promoverá la seguridad de dichas personas mediante la implantación de un carné identificativo del paciente, en el que se especifique la variante de su enfermedad y el tratamiento que está recibiendo, de modo que en caso de emergencia pueda ser trasladado directamente al especialista pertinente y se le aplique el fármaco que mejor se adapta a sus necesidades, sin que haya que perder tiempo en estudiar su historial clí­nico.

Por último, para el presidente de la Asociación de Hemofilia de la Comunidad de Madrid, este es un punto fundamental del acuerdo “porque cuando se produce una lesión, los primeros momentos son decisivos para evitar que queden secuelas”, lo que a su juicio “beneficia a los enfermos y también al sistema sanitario, porque se reduce posteriormente el consumo de medicamentos”.