¿El ejercicio aeróbico mejora la…

La fatiga relacionada con el cáncerEl ejercicio aeróbico puede ayudar a aliviar la fatiga que a menudo se asocia con el cáncer y el tratamiento del mismo, según investigadores de Cochrane. Su revisión sistemática actualizada refuerza los hallazgos de una versión anterior en la fatiga relacionada con el cáncer publicado en The Cochrane Library.

¿Habéis notado un aumento de la fatiga relacionado con vuestro tratamiento para el cáncer?, ¿es el ejercicio una opción que os han recomendado y que ha mejorado esta fatiga? Os animamos a que comentéis, puesto que vuestras experiencias pueden ayudar y motivar a otras pacientes.

La fatiga es un efecto secundario común y posiblemente duradero en el tiempo del cáncer y del tratamiento del cáncer. Puede durar meses o años y lidiar con esta fatiga relacionada con el cáncer es crucial, porque los que sufren sus efectos pueden ser menos proclives a continuar con el tratamiento.

Aunque en el pasado, las personas con fatiga relacionada con el cáncer eran aconsejados a realizar reposo, largos perí­odos de inactividad puede conducir a la pérdida de masa muscular y a aumentar el cansancio, mientras que el equilibrio entre el descanso y la actividad fí­sica puede ayudar a reducir la fatiga. En 2008 una revisión sistemática de Cochrane, sobre los beneficios del ejercicio, encontró algunos beneficios de la actividad fí­sica para la fatiga en el cáncer basados en estudios limitados.

La nueva revisión incluye 28 nuevos estudios a la revisión de 2008. En total, 56 estudios con un total de 4.068 personas con cáncer fueron incluidos. La mitad de los estudios se llevaron a cabo en personas con cáncer de mama. Las personas con tumores sólidos se beneficiaron de ejercicio aeróbico, como caminar o andar en bicicleta, tanto durante como después del tratamiento del cáncer. Otras formas de ejercicio, incluyendo el entrenamiento de resistencia, no redujo significativamente la fatiga.

Según dijo la investigadora principal, Fiona Cramp, de la Facultad de Salud y Ciencias de la Vida de la Universidad del Oeste de Inglaterra en Bristol (Reino Unido), “la evidencia sugiere que el ejercicio puede ayudar a reducir la fatiga relacionada con el cáncer y por lo tanto debe ser considerado como un componente en la estrategia para la gestión de la fatiga, que puede incluir una variedad de otras intervenciones y educación. Esta revisión actualizada proporciona una conclusión más precisa, mostrando especí­ficamente que el ejercicio aeróbico, durante y después del tratamiento del cáncer, puede ser beneficioso.”

Queda por ver cómo el tratamiento del cáncer altera los efectos beneficiosos del ejercicio sobre la fatiga relacionada con el cáncer. La investigación adicional también es necesaria para entender cómo la frecuencia y la duración del ejercicio y el tipo de cáncer, afecta a los resultados.

Cramp también dijo que “veinte y ocho de los estudios incluidos se realizaron en pacientes con cáncer de mama, por lo que necesitamos saber más sobre cómo el ejercicio puede ayudar a las personas con una amplia gama de diagnósticos, incluidos los pacientes con enfermedad avanzada”.