Identifican una nueva ví­a celular…

Investigadores de la Escuela de Medicina de la Universidad de California San Diego, en Estados Unidos, con colaboradores en Corea y Escocia, han identificado una nueva ví­a de señalización fundamental para la respuesta inmune de las células asociada con el inicio del asma alérgico.

El descubrimiento, que se publica este lunes en ‘Proceedings of the National Academy of Sciences’, podrí­a señalar el camino a nuevas terapias que suprimen la respuesta alérgica inflamatoria, ofreciendo alivio potencial a las personas que sufren la enfermedad pulmonar crónica y otras enfermedades alérgicas.

 

Especí­ficamente, los cientí­ficos demostraron que la inflamación del tipo T ayudante 2 (Th2) en el asma alérgico implica a las células dendrí­ticas (DC), un tipo de glóbulo blanco, que desencadenan una reducción en la producción de AMP cí­clico o cAMP, una molécula mensajera clave para la señalización dentro de las células.

En modelos de ratón, la deleción del gen que codifica una proteí­na que promueve la producción de cAMP produjo asma bronquial espontáneo, que comparte muchas similitudes con el asma humano. Por el contrario, el incremento de los niveles de cAMP inhibe la respuesta inflamatoria de las células que se traduce en sí­ntomas caracterí­sticos del asma.

“Estos resultados y el mecanismo relacionado son muy diferentes de la visión actual de la activación de las respuestas especí­ficas de las células T ayudantes”, subraya el investigador principal, Eyal Raz, profesor de Medicina. “El papel de la formación de cAMP y la acción en las células dendrí­ticas en la inducción de la respuesta alérgica fue realmente sorprendente –añade el coautor Paul Insel, profesor de Farmacologí­a y Medicina–. Sugiere que esta ví­a de señalización está implicada en otras funciones relacionadas con la inmunidad”.

Por último, la respuesta inmune de los seres humanos, ratones y otros vertebrados consta de dos componentes fundamentales. El primero es el sistema inmune innato, que reconoce y responde a los patógenos en una forma inmediata y generalizada, pero no confiere inmunidad de larga duración. El segundo es el sistema inmunitario adaptativo, en el que las células T y B altamente especializadas eliminan o previenen el crecimiento de patógenos y crean la memoria inmunológica en el caso de futuros encuentros con el mismo patógeno.