Identifican un gen clave para la formación de hueso
Investigadores de un estudio dirigido por la Universidad del Sur de California (USC), en Estados Unidos, han identificado la acción clave de un gen crítica para la formación de hueso y la evolución de los vertebrados.
El gen Sp7 u Osterix más que probable que surgieron de una familia de genes ancestral hace unos 400 millones de años, ampliando la diversidad de la vida y programando el desarrollo de las células osteoblastos generadoras de hueso. Actualmente, los vertebrados formados por hueso van desde la pequeña rana ‘Paedohryne amauensis’ a la poderosa ballena azul. “Este estudio proporciona un ejemplo fascinante y convincente de cómo la aparición de nuevas redes de regulación de genes se conecta a nuevas capacidades celulares en el proceso evolutivo, específicamente aquí en el programa de formación de los huesos”, dice Hironori Hojo, autor principal e investigador asociado postdoctoral en el Centro Eli y Edythe Broad de Medicina Regenerativa y Biología de Células Madre en la USC. Los investigadores, cuyo trabajo se detalla en un artículo publicado este jueves en ‘Developmental Cell’, dijeron que es la primera evaluación a escala del genoma de cómo Sp7 dirige las células secretoras de hueso llamadas osteoblastos para moldear el esqueleto. Hay una estrecha correlación entre la capacidad de formación de hueso y un gen similar a Sp7. Todos los grupos que componen la diversidad de vertebrados –como el pez cebra, las ranas, las lagartijas, los lagartos, los pájaros, los ratones y los seres humanos– tienen un gen Sp7. Por el contrario, los parientes vivos más cercanos a los vertebrados, incluyendo las ascidias y lampreas, carecen de huesos y de un gen Sp7. Esta correlación arroja luz sobre la historia de la vida en la Tierra: la aparición de Sp7 probablemente estaba estrechamente relacionada con la evolución de la formación de hueso en un ancestro común que dio origen a todos los vertebrados modernos.