Hasta un 17% de los europeos podría sufrir alergia a algún alimento
Se estima que las alergias alimentarias afectan a entre el 6 y 17 por ciento de la población europea, siendo más frecuentes entre los niños que entre los adultos, según datos recogidos en la primera guía europea sobre reacciones alimentarias y anafilaxia, presentada en Congreso Anual de la Academia Europea de Alergia e Inmunología Clínica (EAACI), que se celebra en Copenhague (Dinamarca).
La guía, elaborada por la Academia Europea de Alergia e Inmunología Clínica (EAACI), destaca que las alergias alimentarias más comunes están relacionadas con la leche de vaca, el huevo, la soja, el trigo, el cacahuete, los frutos secos, el pescado y los mariscos. Sin embargo, hasta el momento no existían estimaciones fiables de la prevalencia de estas alergias. Tras una revisión sistemática de cerca de sesenta estudios y meta análisis, los expertos que han participado en la guía concluyen que la prevalencia de la alergia a la leche de vaca en Europa es del 6 por ciento, del 3,6 por ciento al trigo, del 2,5 por ciento al huevo, del 0,4 por ciento al cacahuete del 1,3 por ciento a los frutos secos, del 2,2 por ciento al pescado y del 1,3 por ciento al marisco.
Por grupos de población, la alergia a la leche de vaca y el huevo es más común entre jóvenes y niños, mientras que en adultos y mayores es más común la reacción a frutos secos, pescado y marisco. Al menos 1 de cada 20 niños, según sus padres, han tenido una o más alergias a los alimentos en su vida. Los productos lácteos son los alimentos más frecuentemente identificados por los padres, si bien la guía destaca que las de mayor prevalencia registrada son la alergia al trigo, a los frutos secos, al huevo y al marisco.
Por último, durante el encuentro, han destacado también la anafilaxia como otra asignatura que debe ser mejor controlada. La anafilaxia es una grave reacción de hipersensibilidad generalizada o sistémica, potencialmente mortal, caracterizada por su rápida aparición y el desencadenamiento de problemas respiratorios o circulatorios, y, por lo general, esta asociada a cambios en la piel y en la mucosa.