Los investigadores hallan una misteriosa…

En la imagen, una enfermera vacuna a un niño.Un equipo de investigadores ha identificado en poco más de un año un sí­ndrome similar a la poliomelitis en cinco niños de California. Así­ lo confirman en un estudio que se acaba de presentar en la reunión anual de la Academia Americana de Neurologí­a que se está celebrando estos dí­as en Filadelfia (EE.UU.).

“Aunque el virus de la polio ha sido erradicado de la mayor parte del mundo, otros virus pueden dañar también la médula espinal, lo que lleva a un sí­ndrome similar a la polio”, según señala en el informe uno de los autores, Keith Van Haren, cientí­fico de la Universidad de Stanford (Palo Alto, California) y miembro de la Academia Americana de Neurologí­a (San Francisco). Tal y como relata el documento, en la última década, nuevas cepas del enterovirus se han asociado a deformaciones parecidas a las producidas por la polio en niños de Asia y Australia. Ahora, estos cinco casos de California remarcan la posibilidad de que esté emergiendo también en California un sí­ndrome infeccioso parecido a la polio en California.

La polio es una enfermedad contagiosa que puede causar parálisis. En los años ’50, EEUU sufrió una epidemia de polio que acabó con la introducción de la vacuna. Van Haren señala que él y el resto de los médicos de su  equipo habí­an encontrado varios casos en sus centros médicos y decidieron buscar casos similares en California. Revisaron todas las historias de niños con sí­ntomas parecidos a los que la poliomelitis produce desde agosto de 2012 hasta julio de 2013. Se seleccionaron aquellas en las que los niños tení­an parálisis que afectaban a uno o más miembros de su cuerpo y con anomalí­as en la médula espinal que pudieran explicar dicha parálisis. No se incluyeron a los niños que respondí­an a otros sí­ndromes que causan sintomatologí­a similar, como el sí­ndrome de Guillain-Barre (parálisis ascendente con alteración sensitiva).

Los médicos trataron a estos niños, pero sus sí­ntomas no mejoraron. De hecho, a los seis meses, la movilidad de sus miembros continuaba siendo escasa. Los análisis de dos niños dieron positivo para enterovirus-68, un virus poco común asociado a sí­ntomas similares a los de la polio. En los otros tres, ni se identifió la causa. “Nuestros hallazgos tienen importantes implicaciones para la vigilancia de enfermedades, pruebas y tratamiento”, remarca Van Haren. “Nos gustarí­a hacer hincapié en este sí­ndrome que parece ser muy, muy raro […] Cuando los padres vean sí­ntomas de parálisis en sus hijos deben inmediatamente a que los examine un médico”, concluye.