FAMMA-Cocemfe Madrid aboga por un nuevo modelo de atención residencial para personas con discapacidad y/o movilidad reducida centrado en fomentar y potenciar al máximo nivel posible la autonomí­a personal del colectivo en detrimento de la dependencia.

A juicio de FAMMA, urge avanzar hacia un nuevo modelo de atención residencial que evite la dependencia prematura del colectivo de personas con discapacidad, dado que en la actualidad los centros de atención al colectivo se rigen en base a modelos fundamentalmente asistencialistas ligados al sistema de dependencia que no fomentan, precisamente, la autonomí­a personal de quienes tienen discapacidad y/o movilidad reducida en la medida de lo posible.

Precisamente, esta es una de las principales demandas del colectivo de personas con discapacidad gravemente afectadas, porque, en la actualidad, el sistema residencial les establece unos criterios de prestación asistencial que no tienen en cuenta, por ejemplo, sus necesidades en cuanto a horarios o momentos de ocio y esparcimiento.

Sin ir más lejos, en los centros de atención a personas con discapacidad los horarios de comidas o para dormir no facilitan, en modo alguno, que las personas con discapacidad, especialmente las de mediana edad, puedan llevar un estilo de vida autónomo, con momentos de ocio y esparcimiento fuera del entorno residencial.

Es por ello por lo que, a juicio de la Federación, urge que se abra un debate sobre el modelo residencial que se debe aplicar al colectivo de personas con discapacidad, con el objetivo siempre de potenciar su autonomí­a e independencia al máximo nivel posible y evitar su institucionalización y dependencia forzosa y prematura.

En palabras del presidente de FAMMA, Javier Font, “el modelo de atención residencial para personas con discapacidad debe fomentar siempre la autonomí­a personal e independencia de las mismas, puesto que, de lo contrario, se abocará a al colectivo a una dependencia forzosa que no facilitará, en modo alguno, su integración y participación social”.

Por último, en este sentido, la Federación estima que es preciso diferenciar la atención residencial que debe ser aplicada a colectivos como el de las personas con discapacidad con la que es aplicada a otros colectivos, como el de mayores. Según estima la Federación, en la actualidad, los centros de atención residencial que atienden a ambos colectivos se rigen por patrones similares, cuando esto no deberí­a ser así­, puesto que ambos colectivos tienen las mismas necesidades en cuanto a atención sociosanitaria.