España ocupa el puesto 22…

España ocupa el lugar número 22 en el ‘índice Global de Envejecimiento 2013’, que mide la calidad de vida y el bienestar de las personas mayores en el mundo y que advierte de que, con cerca de 900 millones de personas mayores de 60 años, es urgente tomar medidas para luchar contra la pobreza en la vejez y para hacer frente a la discriminación por edad y al abuso a los derechos de las personas mayores.

Precisamente, este informe, realizado por HelpAge International y financiado con el apoyo del Fondo de Población de las Naciones Unidas (UNFPA), abarca al 89% de las personas mayores en el mundo procedentes de 91 paí­ses y destaca aquellos paí­ses que aún no tienen en cuenta las necesidades de las personas mayores. España ocupa el puesto 22, de los 91 paí­ses analizados, situándose por debajo de paí­ses como Israel, Chile y Eslovenia. Respecto a los cuatro aspectos incluidos en el í­ndice, en seguridad de ingresos ocupa el puesto número 31; en estado de salud, el 39; en empleo y educación, el 50, y en sociedad y entornos adecuados ocupa el puesto número 14.

Asimismo, Suecia es el mejor paí­s para las personas mayores, según este í­ndice, que destaca que el paí­s nórdico este año celebra un siglo del establecimiento de la pensión estatal. Noruega le sigue de cerca, junto a Japón, el único paí­s asiático de entre el ‘top 10’. Islas Mauricio es el paí­s africano que aparece en primer lugar y la lista la cierran Pakistán, Tanzania y Afganistán, que se encuentra en el puesto 91.

Además, el informe pone de manifiesto que el mundo está envejeciendo rápidamente. Las personas mayores de 60 años superan a los niños menores de 5 y en 2050 superarán en número a los niños con menos de 15 años. Según la presidenta de HelpAge Internacional España, Isabel Martí­nez, “la exclusión y la discriminación por edad sigue estando presente en todos los paí­ses y es uno de los mayores obstáculos para satisfacer las necesidades de las personas mayores”.

Por último, por ello, considera necesario que “el envejecimiento sea tenido en cuenta en las agendas nacionales y este í­ndice nos ofrece una mejor comprensión sobre la calidad de vida de mujeres y hombres a medida que envejecen, y nos ayudará a centrar la atención en las cosas que se hacen bien, pero, sobre todo, en aquellas en las que tienen que mejorar”.