El tratamiento temprano del ictus…

En la imagen, el servicio de urgencias de un hospital.Las personas que sufren un accidente cerebrovascular (ACV) isquémico entre leve y moderado que reciben un tratamiento médico de inmediato pueden reducir en gran medida sus probabilidades de desarrollar una discapacidad, según sugiere un estudio reciente.

En un ACV isquémico, un coágulo bloquea el flujo sanguí­neo hacia el cerebro. Según la Asociación Americana del Accidente Cerebrovascular (American Stroke Association), casi nueve de cada diez ACV son ACV isquémicos. Las directrices actuales recomiendan administrar un trombolí­tico en un plazo de 4.5 horas tras el inicio del ACV. Sin embargo, el nuevo estudio halló que cuando los trombolí­ticos se administraban incluso antes, en un plazo de 90 minutos tras la aparición de los sí­ntomas del ACV, los pacientes sufrí­an poca o ninguna discapacidad tras tres meses, en comparación con los pacientes que recibieron los fármacos después de más tiempo. “A pesar del periodo de tiempo de 4.5 horas para administrar los trombolí­ticos, hay diferencias claras entre los pacientes a los que se trata extremadamente rápido (en un plazo de 90 minutos) y los tratados más tarde”, afirmó el investigador lí­der, el Dr. Daniel Strbian, profesor asociado de neurologí­a del Hospital Central de la Universidad de Helsinki, en Finlandia.

“Este hallazgo es una llamada a hacer que el proceso sea más eficiente, desde el reconocimiento de los sí­ntomas, la llamada a la ambulancia, el transporte al hospital y el tratamiento hospitalario”, aseguró. Cada año en EE. UU., cerca de 795,000 personas tienen un ACV. De esas personas, 130,000 mueren, mientras que muchas otras sufren de discapacidad grave a largo plazo.