El riesgo cardiovascular se multiplica…

Una persona llena un vaso de leche enriquecida con calcio.

El consumo elevado de calcio -tanto en la dieta como en suplementos alimenticios- se asocia en mujeres con un mayor riesgo de muerte por enfermedad cardiovascular, según sugieren los autores de una investigación publicada recientemente en la publicación médica ‘British Medical Journal’.

Los expertos recomiendan una ingesta alta de calcio, ya que desempeña un papel fundamental en la fisiologí­a humana, y, como tal, más del 60 por ciento de las mujeres de mediana edad y de edad avanzada en Estados Unidos toma suplementos. Pruebas recientes indicaron un mayor riesgo de enfermedad cardiaca isquémica y accidente cerebrovascular con suplementos de calcio, algo que no se observó en otro ensayo.

Por ello, investigadores de la Universidad de Uppsala en Suecia estudiaron a 61.443 mujeres suecas (nacidas entre 1914 y 1948) durante 19 años para determinar esta asociación con datos de la Causa Sueca de Registro de Mortalidad e información sobre la dieta de la Cohorte de Mamografí­a Sueca. La ingesta total de calcio incluye suplementos de calcio, con el consumo medio más bajo de 572mg/dí­a (el equivalente de cinco rebanadas de queso) y en el mayor de 2137mg/dí­a.

Durante el seguimiento, 11.944 mujeres (17 por ciento) fallecieron; 3.862 de ellas (32 por ciento) murieron de enfermedad cardiovascular; 1.932 (16 por ciento) por enfermedades cardí­acas y 1.100 (8 por ciento) de un derrame cerebral. Las tasas más altas de todas las causas, las enfermedades cardiovasculares y las enfermedades cardiacas, se observaron entre las de ingesta de calcio dietético de 1.400 mg por dí­a y los investigadores observaron también mayores tasas de mortalidad entre las mujeres con un consumo por debajo de 600mg/dí­a.

Por todo ello, los investigadores explican que sus hallazgos sugieren que las dietas muy bajas o muy altas en calcio pueden anular el control homeostático normal causando cambios en los niveles sanguí­neos de calcio y concluyen que el calcio alto está asociado con ‘riesgo más alto de mortalidad por todas las causas y de mortalidad cardiovascular’. Por ello, creen que para evitar las fracturas en personas de edad avanzada, el énfasis debe hacerse en los individuos con una baja ingesta de calcio en lugar de aumentar el consumo de los que ya toman cantidades satisfactorias.