Dos entidades fomentarán la normalización…

El Real Patronato sobre Discapacidad, a través del Centro de Normalización Lingí¼í­stica de la Lengua de Signos Española (CNLSE) y la Organización de Estados Iberoamericanos para la Educación, la Ciencia y la Cultura (OEI), rubricaron este lunes un convenio de colaboración para fomentar la normalización de la lengua de signos tanto en España como en los paí­ses iberoamericanos.

En virtud de este acuerdo, ambas organizaciones impulsarán el diseño y realización de actividades conjuntas de promoción de esta lengua en los ámbitos educativo, cientí­fico, tecnológico y cultural. Asimismo, la OEI, que tiene como estrategia actual el desarrollo del Programa ‘Metas educativas 2021’, pondrá a disposición de este proyecto su red de oficinas en distintos paí­ses Iberoamericanos.

El secretario general del Real Patronato sobre Discapacidad, Juan Manuel Moreno Bonilla, y el secretario general de la Organización de Estados Iberoamericanos para la Educación, ílvaro Marchesi, fueron los encargados de firmar este convenio en un acto celebrado en la sede de la Secretarí­a de Estado de Servicios Sociales e Igualdad. Durante la rúbrica del acuerdo, Moreno Bonilla aseguró que el pacto responde a la necesidad de buscar ví­as de colaboración en la normalización, promoción y difusión de la lengua de signos. ‘Las lenguas no entienden de obstáculos, son las personas las que las mantienen viva’, reiteró. Asimismo, explicó que existen en España 400.000 usuarios de la lengua de signos, de los que 100.000 son personas con discapacidad auditiva y 70 millones de personas en el mundo con sordera. Ellos, puntualizó, son quienes han logrado ‘con su tesón’ que los distintos gobiernos reconozcan el derecho fundamental a utilizar la lengua de signos. Por su parte, ílvaro Marchesi afirmó que la firma de este convenio responde a un objetivo ‘enormemente importante, que es expresión de la fortaleza de la lengua de signos española’. ‘No es sencillo poner en marcha en 20 paí­ses iberoamericanos distintos la dinamización’ de esta lengua, dijo, lo que requiere un ‘enorme esfuerzo’.