El ejercicio fí­sico en los…

En la imagen, un grupo de mayores practica ejercicio fí­sico.El ejercicio fí­sico en el anciano debe prescribirse con la ‘misma exactitud’ que las terapias farmacológicas, según han asegurado diversos expertos reunidos en la sexta reunión nacional de la Sociedad Española de Medicina Geriátrica (SEMEG).

Y es que, tal y como han comentado, “ninguna medicación” ha demostrado, en “múltiples” ámbitos, los beneficios que ha mostrado el ejercicio en la prevención y tratamiento de enfermedades como, por ejemplo, cardiovasculares, respiratorias, obesidad, diabetes, osteoporosis, cáncer, depresión, fragilidad y enfermedades neurodegenerativas como el deterioro cognitivo y la demencia. “La práctica de ejercicio fí­sico es la intervención más eficaz en la fragilidad para retrasar la discapacidad y otros eventos adversos asociados habitualmente a este sí­ndrome. El entrenamiento de fuerza y, en particular, los programas multicomponente (resistencia, equilibrio, fuerza y flexibilidad) tienen cada vez más resultados favorables en este grupo poblacional y sus efectos son más destacados en otros dominios del sí­ndrome, como las caí­das y el deterioro cognitivo”, según ha comentado el vicepresidente de la jornada, ílvaro Casas.