El coste asistencial del párkinson…

Un cuidador, en la imagen, sujeta la mano a un paciente con párkinson.El coste asistencial del Parkinson en Europa asciende a casi 14.000 millones de euros al año, según revelan distintos estudios en los que se analizaron las implicaciones económicas asociadas a esta patologí­a.

Precisamente, en este sentido, según recoge un estudio publicado por la Asociación Europea para la Enfermedad de Parkinson (EPDA), éste es uno de los trastornos neurodegenerativos que superará al cáncer dentro de las enfermedades más comunes en el año 2040. De hecho, en España, se estima que hay 150.000 afectados por la enfermedad de Parkinson y, según un informe elaborado por la Fundación del Cerebro, organización perteneciente a la Sociedad Española de Neurologí­a, para evaluar el impacto social que supone en España, el gasto anual promedio de un paciente supera los 17.000 euros anuales, de lo que se podrí­a estimar que en España supone un coste anual de más de 2.500 millones de euros.

Asimismo, la mayor parte de los gastos los asumen las asociaciones de pacientes y los propios afectados y sus familias. “Los afectados necesitan una serie de cuidados y terapias especí­ficos como son la logopedia, la fisioterapia, el apoyo emocional y psicológico y la estimulación cognitiva. Estos servicios son asumidos por las asociaciones que a través de subvenciones, colaboraciones privadas y cuotas, en ocasiones simbólicas, contratan a profesionales especializados y dotan sus instalaciones. En otras ocasiones, el afectado no tiene acceso a una asociación cercana y tiene que pagárselo de su propio bolsillo”, ha explicado la presidenta de la Federación Española de Parkinson (FEP), Marí­a Jesús Delgado de Liras. En cuanto al progreso de la enfermedad, en el caso de España aproximadamente un 10 por ciento de los afectados presentan Parkinson avanzado. Según progresa la gravedad de la enfermedad, se produce un aumento de los costes (consultas, hospitalizaciones, pruebas o jubilaciones anticipadas).

Además, en esta etapa hay una relación entre el coste total anual y el estado en ‘off’ del paciente (estado que se produce cuando la medicación deja de controlar los sí­ntomas, éstos vuelven a aflorar y la función motora del paciente se vuelve a ver dificultada). En concreto, según apuntan los estudios, los costes totales al año aumentan en función de tiempo que el paciente pasa en un estado ´off´.

En la fase avanzada los pacientes tienen serias dificultades para realizar sus actividades diarias, viéndose obligados a depender de un cuidador. Estos cuidadores, que suelen ser familiares de los afectados, soportan una gran carga fí­sica y emocional derivada de la atención diaria del paciente que en ocasiones, origina trastornos psicosociales como depresión y ansiedad en el cuidador. “Estimamos que un 15 por ciento de los afectados de Parkinson avanzado no recibe el tratamiento adecuado. Desde la Federación defendemos que un paciente bien tratado supone un menor coste al sistema, un paciente que no recibe el tratamiento adecuado va a necesitar más ayuda, más consultas y, en algunos casos, ingresos hospitalarios”, concluyó Delgado.