El copago ha reducido la…

Las farmacias canarias se encuentran entre las que más retraso en el pago sufren con una media de 40 dí­as en cobrar las facturas, según se desprende de los resultados del estudio ‘Impacto económico de la farmacia 2013’ presentado este miércoles por el Grupo Cofares y Antares Consulting.

Las farmacias canarias, entre las que más retraso en el pago sufren con una media de 40 dí­as en cobrar las facturas Ampliar foto En el conjunto nacional, las farmacias presentan una situación financiera “delicada” como consecuencia de las diferentes leyes o reales decretos puestos en marcha en los últimos años por el Gobierno para reducir el gasto farmacéutico público, que han provocado una caí­da de sus márgenes de beneficio, y por los impagos o los retrasos de las comunidades, que hacen que actualmente un 20% de estos establecimientos tengan problemas financieros.

Además, el estudio muestra como hasta un 15 por ciento de estos establecimientos tiene “dificultades serias” y no encuentra fácil acceso a financiación, y hasta un 5 por ciento tiene “alto riesgo de liquidación o de venderse de forma inadecuada”. Actualmente las comunidades donde las farmacias están sufriendo más estos retrasos en el pago son Cataluña, Baleares, Canarias y la Comunidad Valenciana, donde están tardando unos 40 dí­as de media en cobrar las facturas por la venta de medicamentos financiados.

Esto acaba generando una carga “difí­cil de soportar” para muchas de ellas, por el hecho de que “no cumpla quien tiene que cumplir”, ha reconocido Antonio Anguera, de Antares Consulting, durante la presentación del estudio. También ha criticado estos retrasos en el pago el vicepresidente del Grupo Cofares, Juan Ignacio Gí¼enechea, que ve “impresentable” esta situación y urge a las autoridades a buscar a una solución porque “una farmacia ahogada no puede atender en plenitud las necesidades de la sociedad”. 3

Por último, además, a estos impagos se une el descenso del mercado de medicamentos como consecuencia de las diferentes medidas puestas en marcha por el Ejecutivo para reducir esta partida, que de 2010 a 2013 ha sufrido una reducción del 25 por ciento, cifrada en más de 3.000 millones de euros, lo que ha hecho que esta partida se sitúe actualmente en niveles de 2003. El problema es que, con respecto a hace 10 años, el numero de recetas es un 21,6 por ciento superior, lo que hace que “hayan bajado los ingresos pero no la carga de trabajo”, ha defendido Gí¼enechea.