El BSR Valladolid pone en…

En la imagen, jugadores de baloncesto en silla de ruedas.El BSR Valladolid sigue cumpliendo sueños y ofreciendo su servicio a la sociedad, en este caso a través de la puesta en marcha del I Campus de Baloncesto en Silla de Ruedas, que tendrá lugar del 29 de junio al 3 de julio en la localidad vallisoletana de Medina de Rioseco, donde los participantes se alojarán en el Albergue Canal de Castilla y disfrutarán de las instalaciones municipales.

La actividad está dirigida a niños y jóvenes de entre 10 y 18 años con discapacidad fí­sica, y nace con unos objetivos muy claros, tal y como ha explicado hoy durante su presentación el presidente del BSR Valladolid, José Antonio de Castro. El primero de ellos es educativo, y está centrado en fomentar la convivencia amistosa entre los participantes; mejorar los hábitos de disciplina, adquiriendo valores de respeto por los demás, por los materiales, por el cumplimiento de las tareas, actividades y el resto de funciones a realizar, y conocer orientaciones, consejos y diferentes opciones mediante la convivencia y charla entre componentes del campus y técnicos deportivos. Y el segundo es deportivo, bajo la premisa de desarrollar un método integral y globalizado en el entrenamiento; practicar el deporte del baloncesto en silla de ruedas asimilando los principales contenidos técnicos y tácticos que ofrece, con la diversión y el aprendizaje como fines en sí­ mismos, y facilitar la captación de posibles componentes para incorporarse a la disciplina del Fundación Grupo Norte en un futuro.

Según ha advertido De Castro, “lo que se pretende es que los niños se diviertan, se acerquen al mundo del baloncesto en silla de ruedas en un ambiente de convivencia y disfruten de otros deportes como el balonmano, el piragí¼ismo, el tiro con arco o la natación y de diversas actividades de ocio y tiempo libre” que se han programado para los cinco dí­as del Campus. Amén de facilitar la autonomí­a personal de los participantes, ya que es muy positivo que los niños aprendan a adquirir responsabilidades sin la batuta de los padres “que solemos ser siempre demasiado protectores, y más aún si se trata de niños con discapacidad”, ha advertido el presidente de la entidad vallisoletana.