El Ayuntamiento atiende a las reclamaciones de FAMMA y vuelve a permitir el acceso al Retiro de los vehículos de personas con movilidad reducida
Famma-Cocemfe Madrid se felicita por lo que considera un ejercicio de justicia y sensibilidad por parte del Ayuntamiento de Madrid, quien ha rectificado y de nuevo permitirá el acceso al Parque del Retiro a los vehículos de las personas con movilidad reducida, con la novedad de que este acceso estará vinculado a la posesión de la tarjeta PMR (Persona con Movilidad Reducida) o al grado de movilidad reducida reconocido a través del Certificado de Discapacidad.
A partir de ahora, las personas con limitaciones en su movilidad que se encuentren en posesión de alguno de esos dos documentos, podrán entrar en el parque madrileño con su vehículo a través de la puerta ubicada en la Calle Alfonso XII y llegar hasta la estatua del íngel Caído, donde serán aumentadas el número de plazas para que estas personas puedan estacionar su vehículo.
De esta forma se pone fin a una decisión tomada por el consistorio madrileño y denunciada con anterioridad por la Federación, por la que desde el 1 de enero de 2012 se vetó el acceso de las personas con discapacidad con sus vehículos al Parque del Retiro, con lo que muchas personas con discapacidad veían así prohibida la zona a disfrutar del ‘pulmón verde’ del centro de la capital.
“Inmediatamente después de conocer la implantación de esta prohibición, consideramos necesario mantener una reunión con el Ayuntamiento de Madrid, para explicarles las negativas consecuencias que para el colectivo de personas con discapacidad había supuesto este hecho”, asegura Javier Font, presidente de Famma-Cocemfe Madrid.
“En consecuencia”, añade, “y como resultado de la misma, el área competente ha sido sensible a nuestro requerimiento, lo cual agradecemos, ya que nuestra explicación junto con su sensibilidad ha dado como resultado incluso algunas mejoras que estimábamos necesarias para garantizar el acceso a todas aquellas personas con movilidad reducida que, por su situación, tuvieran que vivir auténticas odiseas para alcanzar ciertas zonas del parque, o que incluso no pudieran acceder a él”.
La nueva realidad permitirá de nuevo que muchas personas puedan dirigirse a lugares tan emblemáticos del parque madrileño como son el Palacio de Cristal o los jardines de Cecilio Rodríguez de manera más fácil para ellos, un derecho que tienen por el mero hecho de ser ciudadanos ya que, como todos, demandan de lugares en los que escaparse del bullir de la ciudad.