El 50,5% de los cuidadores mayores de 65 años de personas dependientes no recibe ningún tipo de ayuda pública para desarrollar su labor. Así­ consta en el último ‘Barómetro del Mayor’, realizado por la Unión Democrática del Pensionista (UDP) en colaboración con el Imserso.

El estudio muestra que en un 21,2% de los casos financian ellos mismos ayuda privada, un 24% cuenta con apoyo familiar esporádico y sólo un 4,2% recibe algún tipo de apoyo de los servicios sociales.
Por su parte, el 36,7% de los cuidadores del grupo general de población no recibe ningún tipo de ayuda; sólo un 11,2% puede pagar los servicios de un cuidador, y únicamente un 3,6% recibe apoyo de los servicios sociales, incrementándose el porcentaje de los que tienen ayuda familiar hasta un 48,5%.

Del mismo modo, el barómetro muestra que el 72% de los cuidadores mayores de 65 años conviven con la persona que cuidan, realizando esta labor de forma continuada en el 91% de los casos. A su vez, entre el grupo de población general, el 49,9% de los cuidadores conviven con la persona dependiente, realizando en el 81,2% de los casos su labor continuamente.

En cuanto al tiempo que llevan desempeñando esta labor, el 86,3% de los cuidadores mayores de 65 años lleva una media de 11 años, y el 81,9% del grupo de población general lleva desempeñando esta labor una media de siete años.

Por último, el ví­nculo que une en la mayorí­a de los casos recogidos en el estudio a la persona que recibe los cuidados y al cuidador es familiar. Entre los mayores de 65 años principalmente es el cónyuge (53%), seguido de los hijos (12%), la madre (9,2%) u otro familiar (17,7%). Por su parte, entre la población en general el cuidado se dirige a los padres (48,8%), al cónyuge (14,2%), la abuela (9,3%) u otro familiar (15,2%).