Diez hospitales españoles implantarán marcapasos…

En la imagen, un equipo de cirujanos.Diez hospitales españoles empezarán este año a utilizar el marcapasos sin cables más pequeño del mundo, que obtuvo en abril el marcado CE.

Está previsto que, a finales de este año, se utilice en más de una veintena de hospitales y que se hayan implantado más de 100 dispositivos. Para la Sociedad Española de Cardiologí­a (SEC), el marcapasos sin cables es un hito en el tratamiento cardiaco y consigue reducir las posibles complicaciones. Uno de los problemas principales de los marcapasos actuales son las infecciones por causa de los cables (endocarditis). Este marcapasos, al no usar cables, elimina por completo la posibilidad que estos se rompan y disminuye el riesgo de infección y de hematomas. Según el estudio recientemente publicado en European Heart Journal, el marcapasos sin cables más pequeño del mundo ha cumplido con las medidas de seguridad y rendimiento. Podrá reemplazar de forma completa a los marcapasos que hoy conocemosCon una décima parte del tamaño del marcapasos actual, este dispositivo se coloca directamente en el corazón mediante un catéter insertado a través de la vena femoral. La principal ventaja de esta tecnologí­a es que no requiere del uso de cables para ofrecer terapia de estimulación; más bien, está unido al corazón a través de pequeñas patas y proporciona impulsos eléctricos a través de un electrodo en el extremo del dispositivo. En contraste con el procedimiento actual de implante del marcapasos, este no requiere de incisiones quirúrgicas en el pecho ni de la creación de ningún “bolsillo” debajo de la piel. Esta novedad elimina las posibles complicaciones derivadas del acceso de los electrodos y de la colocación del generador. Además, elimina cualquier signo visible del dispositivo. El estudio que ha verificado este marcapasos ha contado con la participación 23 hospitales de 11 paí­ses distintos entre los que se encuentra el Hospital Clí­nic de Barcelona. Según el doctor Lluis Mont, jefe de la Sección de Arritmias del Hospital Clí­nic de Barcelona, “se trata de un procedimiento relativamente simple, de 30 minutos de duración. Además, no deja ninguna cicatriz visible”. Este dispositivo está especialmente indicado para aquellos pacientes que no precisan de estimulación en la aurí­cula, que supone entre un 30% y un 50% de las personas que necesitan un marcapasos. El doctor José Ramón González-Juanatey, presidente de la SEC, asegura que “en un futuro no muy alejado, y una vez se adquiera experiencia con esta técnica de implantación, puede reemplazar de forma completa lo que hoy conocemos como los marcapasos convencionales”.