Descubren un nuevo método para…

Una mujer se somete a una prueba de detección de cáncer de mama.

Un grupo de cientí­ficos del Instituto de Investigación Scripps (TSRI), de Estados Unidos, acaba de identificar un mecanismo a través del cual las mitocondrias, las centrales eléctricas de la célula, pueden controlar la agresividad de distintos tipos de tumores. Gracias a este hallazgo, publicado recientemente en la revista cientí­fica ‘Journal of Clinical Investigation’, los investigadores desarrollaron un tratamiento que inhibe la progresión del cáncer y prolonga la vida de ratones sometidos a experimentos clí­nicos.

El equipo investigador espera poder proceder rápidamente a los ensayos clí­nicos en humanos para probar este nuevo enfoque terapéutico que ya está en uso para otras condiciones. Investigaciones anteriores sugieren que las mutaciones que afectan a las mitocondrias, que son clave para la producción de energí­a en las células, influyen fuertemente en la agresividad de un tumor, pero el mecanismo no estaba claro.’Decidimos investigar un complejo proteico especí­fico, llamado complejo I mitocondrial, que determina crí­ticamente la producción de energí­a de la respiración celular’, dijo el autor principal del estudio, Antonio F. Santidrián, investigador asociado en el laboratorio de TSRI.

Las investigaciones, que permitieron dar con un mecanismo que permite detener la agresividad de las células tumorales, podrí­a beneficiar a las personas con riesgo de desarrollar cáncer de mama agresivo, tal y como indicó el grupo investigador, además de ofrecer un tratamiento alternativo a la quimioterapia y la radioterapia para evitar recurrencia de la enfermedad e incluso proporcionar un tratamiento preventivo para las mujeres con antecedentes familiares de cáncer de mama, concluyen los cientí­ficos.