Descubren una nueva ví­a terapéutica…

Una especialista en investigación clí­nica, en la imagen, trabaja con células madre en un laboratorio.El Instituto de Investigación Biomédica de Bellvitge y el Vall d’Hebron Instituto de Investigación acaban de demostrar que la administración de células madre mesenquimales modificadas genéticamente regenera tejido pulmonar y detiene procesos inflamatorios en enfermedades pulmonares agudas.

Los investigadores, según han informado estos centros catalanes de investigación, han probado el método en ratones con lesión pulmonar aguda. Los resultados del estudio se publican en la revista American Journal of Respiratory Cell and Molecular Biology.

La lesión pulmonar aguda y su manifestación más severa, el sí­ndrome de distrés respiratorio agudo, se caracterizan por ser procesos inflamatorios que dañan los pulmones con una mortalidad de entre el 40 y el 50 por ciento. Actualmente no existe ningún tratamiento eficaz para su cura y sólo se pueden administrar cuidados paliativos.

El investigador del grupo de Genética Molecular Humana del Idibell, Josep Maria Aran, ha apuntado que “desde hace unos años se trabaja en la administración de células madre mesenquimales humanas procedentes de tejido adiposo obtenido de liposucciones en diferentes patologí­as. “Nosotros hemos comprobado que estas células madre son capaces de llegar fácilmente a los pulmones y allí­ segregan sustancias antiinflamatorias y factores de crecimiento”, ha añadido.

Los investigadores del Idibell y del VHIR han introducido una modificación genética en estas células que mejora el tratamiento. La citoquina IL33 es una proteí­na que actúa como señal de alarma en estos pacientes. Cuando se inicia el daño a los pulmones, las células segregan esta sustancia que es altamente proinflamatoria y provoca una respuesta muy fuerte del sistema inmunitario. “Pensamos que si modificábamos genéticamente las células madre mesenquimales para que segreguen una molécula antagonista de IL-33 se podrí­a detener el proceso inflamatorio y vimos que, en ratones, el efecto era más positivo que con las células sin modificar: hay regeneración del tejido pulmonar y prácticamente anula el proceso inflamatorio en los pulmones”, apunta Aran.

Por último, el Idibell ha firmado un acuerdo de licencia con la empresa vasca Histocell sobre esta modificación genética y actualmente ya están trabajando para que este “medicamento inteligente” pueda llegar a la fase clí­nica y probarlo con pacientes.