CERMI Madrid reitera que la…

Trabajadores en silla de ruedas en su puesto de trabajo.

CERMI Comunidad de Madrid desea reiterar su profundo desacuerdo con la dura polí­tica de recortes que está aplicando la Subdirección General de Integración Laboral de la Comunidad de Madrid sobre los Centros Especiales de Empleo (CEE), dado que aboca en la actualidad a muchos de ellos a una situación de asfixia económica insostenible.

Pese a que muchos son viables, el esfuerzo inversor de la Comunidad hacia estos centros, cruciales para la inserción laboral de las personas con discapacidad, es, año tras año, notablemente menor. Tanto es así­ que desde 2011, según estimaciones de CERMI Madrid, el presupuesto público de las polí­ticas activas de empleo, dentro del que se encuentran las ayudas al fomento del empleo protegido en los CEE, se ha reducido un 70% en la Comunidad de Madrid, al pasar de 200 millones de euros en 2011 a los 60 del presente año.

Además, tal y como vienen exponiendo sus responsables, las partidas económicas llegan a los CEE con importantes retrasos, aunque la Comunidad manifieste lo contrario para intentar acallar las crí­ticas, (asegura que ya ha invertido ‘el 95%’ de los 34 millones de euros presupuestados en 2012 para apoyar estas instalaciones).

El Comité muestra su preocupación por la polí­tica continuada de persecución a estos centros por parte del gobierno regional no solamente en lo referente a la concesión de subvenciones, sino también debido al hecho de que la Subdirección General de Integración Laboral se posiciona radicalmente en contra de la posibilidad de que estos centros puedan reorientar sus posibilidades de negocio (no permite que cambien o amplí­en la actividad inicial con la que empezaron a funcionar como Centros Especiales de Empleo). Esta Subdirección actúa por libre y aplicando la ley bajo su interpretación siempre destructiva.

Por otra parte, el Comité incide en que la Administración regional utiliza como excusa el hecho de que la normativa recoge que estos centros deben ser ‘viables con independencia de las ayudas oficiales’. CERMI Madrid manifiesta precisamente que lo son, pero que esta premisa no debe servir a la Administración para desentenderse de cualquier apoyo a estos centros, no solo a nivel económico sino a todos los niveles que indica la Ley. Precisamente, el Comité recuerda que en los contextos de recesión, o en aquellos desfavorables para el colectivo de personas con discapacidad, el Gobierno regional deberí­a poner especial énfasis en salvaguardar el empleo, sobre todo en colectivos como el de la discapacidad, en el que las tasas de desempleo, así­ como la precariedad laboral, son más altas que en el resto de trabajadores.

Por otra parte, CERMI Madrid reitera que si los Centros Especiales de Empleo no fuesen viables, ya habrí­an cerrado ante la pasividad y la falta de compromiso a nivel económico y social de la Administración, en general, y de la citada Subdirección general, en particular. Por todo ello, desde CERMI se reclama que no se engañe a la opinión pública con falsos anuncios y que se tomen todas las medidas oportunas para evitar que las mas de 9.000 personas que dependen de los CEE madrileños puedan ser ví­ctimas de la destrucción de empleo o de ajustes sociales y económicos importantes como consecuencia de las polí­ticas de austeridad.