Casi ocho de cada diez…

Casi 8 de cada 10 padres que tienen algún hijo con discapacidad (78%) creen que estos no podrán trabajar en el futuro bien por las barreras existentes en la empresa ordinaria bien por el elevado grado de afectación de su hijo, según el quinto Informe Discapacidad y Familia elaborado por la Fundación Adecco.

El estudio, basado en una encuesta realizada a 500 familias residentes en España, revela que el 61% de padres con hijos con discapacidad cree que estos no podrán trabajar en entornos laborales ordinarios, es decir, no protegidos, debido a la existencia de prejuicios y estereotipos. Por su parte, un 17% declara que no cree que su hijo pueda trabajar debido a su elevado grado de afectación.

La coordinadora del programa Plan Familia de la Fundación Adecco, Myriam Ganado, ha explicado que aunque se ha avanzado mucho en los últimos años, “muchas empresas siguen defendiendo la no contratación de personas con discapacidad” argumentando “falta de experiencias previas y desconocimiento de las capacidades de la persona con discapacidad”.

También influye, según añade, “la sobreprotección de muchos padres hacia sus hijos con discapacidad, que presuponen que estos no pueden realizar ciertas tareas sin darles la oportunidad de demostrarlo, lo que sienta un precedente negativo de cara a su futura inserción laboral”. Por otro lado, de los datos se desprende que un 45% de los encuestados ya ha sentido estas barreras en el ámbito escolar, donde sus hijos “no pueden participar en igualdad de condiciones en las actividades educativas”. Las principales mencionadas son las barreras arquitectónicas (70%), seguidas de las sensoriales (67%) y las psicológicas (55%).