Aumenta el número de lesiones…

La velocidad y la fuerza con la que actualmente se juega al tenis es el motivo por el que cada vez más jugadores sufren lesiones en el hombro, la espalda y la cadera.

Las consecuencias de esta nueva forma de jugar, que afecta a jugadores de todas las edades y niveles de competición, pone de manifiesto la importancia que tienen los entrenamientos, los controles médicos y el material deportivo a la hora de prevenir una lesión. Es una de las conclusiones del estudio “Las lesiones en el tenis y su prevención”, que han presentado esta mañana en Barcelona el Dr. íngel Ruiz-Cotorro, Responsable de los Servicios Médicos de la Real Federación Española de Tenis, y Antonio Guzmán, Director del írea de Promoción de la Salud de Fundación MAPFRE. El informe, realizado en los últimos 12 meses, ha analizado las condiciones fí­sicas de un total de 1.458 tenistas de distintos clubes y escuelas de competición, así­ como 30 de las mejores raquetas de España, entre ellos, Rafa Nadal, David Ferrer, Garbiñe Muguruza y Carla Suárez. El objetivo del trabajo es dar a conocer los factores que influyen en las lesiones, analizar su incidencia en función de la edad y el nivel competitivo de los jugadores, y ofrecer recomendaciones para prevenir este tipo de daños. La investigación revela que mientras que en el segmento de niños y principiantes apenas se producen lesiones de consideración, la incidencia de estas se incrementa de forma considerable año tras año entre los jóvenes con aspiraciones a jugar en el terreno profesional. Este colectivo sufre principalmente lesiones en el hombro, en parte porque su nivel de musculatura no está suficientemente desarrollado para grandes niveles de exigencia, y de muñeca, debido al juego a dos manos, el más habitual hoy. También pone de manifiesto que los jugadores profesionales son un grupo con un alto í­ndice de lesiones debido a su elevada intensidad de entrenamiento diario y a los torneos disputados y que es en este colectivo donde las lesiones de cadera están más extendidas, en gran medida debido a que la velocidad de la pelota ha cambiado las posiciones de golpeo, sin conceder el tiempo adecuado para preparar el golpe. Para prevenir y reducir la gravedad de las lesiones relacionadas con el tenis, Fundación MAPFRE y el equipo de investigación que dirige el Dr. íngel Ruiz-Cotorro, subrayan la importancia de conocer el estado de salud y las capacidades fí­sicas de los menores que empiezan a practicar tenis, “vital para adecuar sus cargas de trabajo y no perjudicar su crecimiento”. También aconsejan a los jugadores que no sólo mejoren la técnica sino que adecuen las horas a sus condiciones fí­sicas, “primando la calidad a la cantidad”. Durante el acto, celebrado en el marco del Torneo Conde de Godó, el Dr. íngel Ruiz-Cotorro ha destacado que “cualquier jugador debe llevar un seguimiento médico en todas las etapas con el fin de garantizar su bienestar fí­sico y la prevención de lesiones”. “A partir de los 35 años, ha destacado, es casi obligatorio realizarse un ecocardiograma, un estudio avanzado para registrar la actividad eléctrica del corazón y una prueba de esfuerzo en laboratorio”.