Belén Luján es una profesora que tiene una discapacidad del 44% y trabaja en un colegio sin ascensor.

Belén Luján ha trabajado en varios centros educativos de la Comunidad de Madrid y tras años de solicitudes finalmente consiguió el traslado al colegio República del Ecuador, en Opañel, un colegio cercano a las inmediaciones de su casa.

Aunque su situación no podrí­a ser mejor cada dí­a esta profesora se enfrenta al reto personal de subir los escalones que la lleven hasta sus aulas lo que ha hecho que la idea de dejar el centro cada vez sea más fuerte.

Con un 44% de discapacidad ha comprendido que «Como norma, los colegios no son lugares adaptados, tan solo hay algunos centros preferentes para alumnos con necesidades especiales en ciertos distritos», «No puedo seguir aquí­ a largo plazo a pesar de que estoy encantada con mis compañeros y vivo muy cerca».

Esto no solo afecta a alumnos y a profesores con algún tipo de problema de movilidad crónico si no que, como ella misma recuerda, ningún escolar está libre de sufrir un percance.

En la actualidad, en la Comunidad de Madrid hay cerca de ochocientos colegios de educación infantil y primaria, de los que alrededor de 240 se encuentran en la capital. Para los alumnos con necesidades educativas especiales asociadas a problemas de movilidad la Consejerí­a de Educación cuenta con un listado de centros de escolarización preferente para menores con discapacidad motora.

Dese la Comunidad «tendrá en cuenta» la situación de la profesora e instan a los centros a tomar otras soluciones, aunque concluyen diciendo que «Los colegios son accesibles, aunque igual no lo son al cien por cien»