La Federación de Asociaciones de Personas con Discapacidad Fí­sica y Orgánica de la Comunidad de Madrid (FAMMA-Cocemfe Madrid) trabaja por la accesibilidad universal en todos sus vértices, para lograr una mayor integración del colectivo.

Un asunto que es de todo y que está ligado al entorno a la arquitectura y a o personal. Este fue el tema central de la jornada organizada por FAMMA-Cocemfe Madrid y Plena Inclusión pensada para analizar las condiciones materiales y los sistemas de gestión preventiva en las empresas, desde la perspectiva de la accesibilidad universal.

En su aplicación en el ámbito laboral nos debemos fijar en el reglamento que marca la ley y en el código técnico, como ha comentado Jorge Palomero, arquitecto del Gabinete de accesibilidad Universal de FAMMA. En su intervención hizo un recorrido por las deficiencias más habituales que nos encontramos desde que el usuario sale de su domicilio hasta que ocupa su puesto de trabajo. Barreras que deberí­an ser solucionadas en base unos principios: Igualdad de uso, flexibilidad, espacios simples e intuitivos, tolerancia a los errores y escaso esfuerzo fí­sico.

Estos aspectos tienen otra vertiente en los planes de emergencia y autoprotección con los que debe contar una compañí­a o Institución, pensando en todas las personas independientemente de su condición y en todos los organismos independientemente de cualquiera que sea su actividad. Pedro Merodio, ingeniero de obras públicas, ha puesto el acento en la necesidad de crear espacios refugio o de confinamiento para las personas que tienen dificultades para abandonar un edificio en caso de emergencia.

Pero sin duda hay cosas que están más alcance, y que solo necesitan de voluntad en ambos sentidos para dar respuesta a la accesibilidad laboral. Para Marta Meizoso, directora del área de Asuntos sociales de FAMMA, la autonomí­a tiene varios componentes: tomar nuestras propias decisiones, lograr nuestras metas, desarrollar habilidades sociales, todos factores que tienen que verse reflejados en aplicaciones prácticas. Para todo ello debemos evitar los prejuicios, trabajar por la motivación de las personas con discapacidad, apoyar su emprendimiento, y convertimos en apoyos naturales que fomenten la participación del colectivo.