La discapacidad sobrevenida

En España, entre 2006 y 2015, 1.3 millones de personas resultaron lesionadas en un accidente de tráfico, el equivalente al 3% de la población.

Según el estudio “El impacto de los lesionados por accidente de tráfico en la seguridad vial. Análisis y evolución de una década (2006-2015)”, elaborado por la Fundación Lí­nea Directa con la colaboración de la Fundación Española para la Seguridad Vial (Fesvial) en el que se analizan 912.000 accidentes con lesiones registrados en este periodo por la Dirección General de Tráfico (DGT). El 70% de estos lesionados padecen alguna secuela de por vida.

Entre las lesiones más comunes se encuentran la enfermedad traumática, las lesiones en la zona cervical, lumbar o dorsal, fracturas de hueso y el traumatismo cráneo-encefálico. A ello se suman las amputaciones que suelen producirse sobre todo en accidentes de motocicleta, bicicleta o atropellos.

Aunque cada caso es único, existen ciertas lesiones que suelen darse con mayor frecuencia. El 60% de las lesiones tienen lugar en turismos, frente a un 27% en motocicletas o ciclomotores, un 2% en autobuses, un 1% en vehí­culos pesados y el 4% en otro tipo de vehí­culos.

En muchos casos, las lesiones provienen de graves negligencias por parte de los conductores, como conducir en estado de intoxicación por alcohol y/ o drogas y no utilizar los dispositivos de protección como el cinturón de seguridad o los cascos en las motocicletas. De hecho, según el estudio de la Fundación Lí­nea Directa, el 44% de los niños fallecidos en accidente de tráfico y el 30% de los que resultaron heridos graves, no llevaban sillita infantil. Por si eso fuera poco, el 32% de los fallecidos y el 19% de los heridos graves, no usaban cinturón de seguridad. Respecto a los motoristas, el 17% de los motoristas fallecidos en un siniestro durante la última década, no llevaba casco.