Seis fotógrafos con discapacidad visual…

El Museo Tiflológico, que inicia los actos de su 25 aniversario, reúne desde ahora las obras de seis fotógrafos con discapacidad visual grave que, puestos tras las cámaras, muestran su visión de la realidad en sus trabajos. La exposición, formada por 12 fotografí­as, se puede visitar desde este viernes hasta el 18 de marzo de martes a viernes de 10.00 a 14.00 horas y de 17.00 a 20.00 horas, y los sábados de 10.00 a 14.00 horas.

Las obras expuestas cuentan con los tí­tulos en braille y están provistas de códigos QR, con información accesible a personas con ceguera o discapacidad visual a través de teléfonos móviles. Además, cuentan con ‘beepcons’, balizas inteligentes de guiado diseñadas para facilitar a las personas con discapacidad visual la identificación y localización de objetos cercanos, mediante una aplicación móvil.

Carme Ollé i Coderch (Barcelona) se incorporó al mundo del arte en 2002 como fotógrafa amateur, habiendo realizado más de 200 exposiciones. Al argentino Marcelo Bilevich su baja visión le limitó su trabajo en la fotografí­a analógica. En el año 2007, con la cámara digital, todo cambió, ya que pudo controlar todo el proceso fotográfico.

A José Julio Flores (Madrid) su discapacidad visual no le ha impedido exponer y participar con su obra en distintos proyectos. Sus fotografí­as han sido expuestas en la Galerí­a Dalí­ (Toledo) o en la Sala de Exposiciones del Centro de Promoción de la Artesaní­a (Talavera de la Reina).

Gregorio Martí­nez (La Rioja) es un autodidacta de la fotografí­a. Una vez superadas las dificultades visuales continuó realizando fotografí­a para demostrar las múltiples visiones accesibles de ciudades monumentales y paisajes en plena naturaleza.

Por su parte, Juan Torre (Vizcaya) fue reportero gráfico en los inicios de su actividad y publicó en diversos medios de prensa. Comenzó su experiencia profesional como redactor gráfico en publicaciones como ‘La Gaceta del Norte’, ‘Tribuna Vasca’, o ‘Diario 16’.

Chon Mayoral (Madrid) ha elaborado su trabajo en el pequeño taller-laboratorio que ha montado en su casa. Su incursión en la fotografí­a comienza en 2012, a raí­z de un curso sobre cómo abordar la fotografí­a desde el punto de vista de la discapacidad visual.

El Museo Tiflológico, situado en la calle de La Coruña de Madrid, es un espacio accesible a todos los públicos, donde se emplean, como canales de entrada de la información, el tacto y el oí­do, junto al tradicional de la vista. En sus salas se muestran cuatro colecciones: la de maquetas de monumentos arquitectónicos, la de obras de artistas con discapacidad visual grave, la de material tiflológico y la de libros en braille y otros sistemas de escritura anteriores a la creación de la ONCE.